27 mayo 2025
El Ministerio de Igualdad, a través de la Delegación de Gobierno contra la Violencia de Género, ha hecho públicos los principales resultados del estudio ‘Violencia contra mujeres, niñas, niños y adolescentes en el ámbito digital’, con el que se pretende analizar las peculiaridades de la violencia digital ejercida sobre las mujeres y los menores de edad, examinar su impacto, así como las posibles carencias legales y el marco normativo existente. El informe ha sido promovido y financiado por la Delegación del Gobierno contra la Violencia de Género y realizado por la Asociación de Mujeres Juristas Themis.
El estudio destaca que la violencia digital es un fenómeno en constante evolución que requiere de una respuesta integral, normativa, educativa y tecnológica para proteger a mujeres y menores. El objetivo final ha de ser reducir riesgos y garantizar un entorno digital seguro y respetuoso.
El trabajo se divide en tres grandes bloques: el primero busca un acercamiento a la realidad de la violencia digita, el segundo pone el foco en los y las menores de edad y, el último, se centra en el marco legislativo.
Como conclusiones, el estudio destaca la inexistencia de un concepto único y universal de ‘violencia digital’ dificultando, entre otras cuestiones, su regulación penal.
En segundo lugar, se pone el foco en que la violencia en línea tiene una especial incidencia e impacto en las mujeres y las niñas. Refleja las desigualdades de género perpetuando los roles de género y las estructuras patriarcales. Las investigaciones de la ONU arrojan que más del 73 % de las mujeres han sido expuestas o han experimentado algún tipo de violencia en internet y el 90 % de las víctimas de distribución de imágenes íntimas de contenido sexual sin consentimiento son mujeres.
Además, la exposición temprana a contenidos pornográficos y violentos, junto con la falta de regulación específica, contribuyen a normalizar conductas dañinas y a afectar la salud emocional y física de menores.
Otro factor que se subraya en el informe es el papel clave de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) en la lucha feminista. Estas herramientas se han convertido en un recurso importante para organizar la acción colectiva, dar visibilidad a los discursos de concienciación y reivindicación y aumentar la capacidad de convocatoria.
De entre esas herramientas, se especifica en el documento, hay una en especial con gran repercusión en las mujeres: la Inteligencia Artificial (IA), que ha generado nuevos retos y peligros que deben ser afrontados. Por ejemplo, se ha de tener en cuenta que, debido a su funcionamiento de aprendizaje, puede replicar sesgos, discriminación y vulnerar derechos que lleguen a afectar a las decisiones que se tomen, de manera injusta, en áreas como la contratación, la justicia penal y el acceso a servicios.
El análisis hace referencia, asimismo, a que la respuesta legal en España ha avanzado con reformas que tipifican delitos específicos como el grooming, sexting, acoso, difusión de pornografía infantil y delitos relacionados con la trata y explotación sexual, incluyendo aspectos tecnológicos.
Con todo, uno de los obstáculos en la lucha contra la violencia digital que sigue afectando a mujeres y menores es la falta de formación especializada desde la perspectiva de género en el ámbito de la ciberdelincuencia, del mismo modo que la insuficiencia de recursos.
Como propuestas de mejora, el informe sugiere que se defina la violencia digital, además de crear protocolos unificados, fortalecer la cooperación internacional, y tipificar nuevos delitos relacionados con la identidad digital y la manipulación mediante IA.