25 de septiembre de 2025
La delegada del Gobierno contra la Violencia de Género, Carmen Martínez Perza, ha comparecido hoy en la comisión de seguimiento y evaluación de los acuerdos del Pacto de Estado en materia de Violencia de Género en el Congreso de los Diputados, en la que ha explicado el funcionamiento y el estado del sistema de seguimiento por medios telemáticos de las prohibiciones de aproximación impuestas en materia de violencia de género y violencia sexual.
La delegada ha comenzado su intervención pidiendo disculpas “a todas aquellas mujeres supervivientes de la violencia machista que se están sintiendo inquietas por la situación que estamos viviendo”. “Su sufrimiento es mi sufrimiento, su bienestar y su seguridad es lo que nos mueve y por lo que trabajamos a diario en la Delegación del Gobierno contra la Violencia de Género”, ha aseverado.
Martínez Perza ha remarcado en sede parlamentaria que las víctimas “siempre han estado protegidas” y que “las pulseras salvan vidas todos los días”. A fecha de 31 de agosto, existían 4.730 mujeres en este sistema de protección y “pueden sentirse seguras”, ha afirmado, para añadir que, de hecho, “ninguna mujer con dispositivo ha sido asesinada” y se trabaja “a diario por y para su seguridad y su bienestar”.
La delegada del Gobierno contra la Violencia de Género ha recordado que el sistema COMETA no es la única medida de protección a las víctimas, y que estos dispositivos se instalan cuando la víctima desea contar con ese plus de protección o cuando el órgano judicial lo considera conveniente. De esta forma, la confianza en estos dispositivos ha ido en aumento, pasando de 1.800 en 2018, a las 4.730 del último dato registrado.
La delegada ha detallado su funcionamiento y ha puesto de relieve que el sistema controla cada día de media 30 millones de geoposicionamientos. Ha expuesto, además que, si el agresor entra en las zonas de exclusión o intenta manipular los dispositivos, en la Sala COMETA salta una alerta e inmediatamente se despliegan los protocolos de actuación, que son activados por profesionales especializados en violencia de género y formados para ello.
“Sin ser infalible, con nuestro sistema no se ha producido ningún asesinato de ninguna mujer portadora de estos dispositivos. Es mentira que en 2024 una mujer fuera asesinada mientras portaba un dispositivo. Tampoco antes ni después”, ha dejado claro Martínez Perza.
Sobre el contrato en vigor, la delegada del Gobierno contra la Violencia de Género ha relatado que la UTE formada por Vodafone y Securitas fue la única empresa que superó la licitación, adjudicándose el servicio por un total de 42,6 millones de euros. La UTE comenzó a operar el 8 de febrero de 2024, aunque existió un periodo de transición, de tres meses, en el que se subcontrató a Telefónica, anterior adjudicataria y encargada del servicio desde su puesta en funcionamiento, y que en esta ocasión no había concurrido a la licitación.
Mejoras del servicio
La delegada del Gobierno contra la Violencia de Género ha insistido en que el sistema es “técnicamente complejo” y que desde 2009, año que comenzó a funcionar, se realizan periódicas actualizaciones y mejoras del mismo, que optimizan tanto la precisión de los dispositivos, como el funcionamiento del servicio. Con el actual contrato, esas mejoras se han centrado en la ampliación del uso de los dispositivos a las víctimas de violencia sexual, la instalación de nuevos dispositivos con una mayor autonomía y mejor localización, el que se ofrezca smartphones a las víctimas para no estigmatizarlas, o la utilización de dispositivos multiagresor y multivíctima, para que sólo se necesite uno, aunque puedan existir varios agresores. Se ha incorporado, asimismo, un botón SOS para contacto instantáneo de la víctima con el centro de control y se están dando los primeros pasos para que el sistema sea público, con dispositivos propios y de tecnología mejorada que antes eran de renting, con una plataforma que ya es propiedad del ministerio, como también la app instalada en los dispositivos.
Martínez Perza ha mantenido en el Congreso que la transición a los nuevos dispositivos se realizó “sin interrupciones del servicio, y realizando una formación al nuevo equipo”.
Plan de seguimiento
Durante su comparecencia, la delegada ha señalado que las actualizaciones y mejoras del servicio son continuas y se realizan de forma “proactiva y discreta” por parte de la empresa adjudicataria, y tras análisis de propuestas del personal de Sala COMETA o de la Delegación del Gobierno contra la Violencia de Género. “Se trata de un servicio estable, consolidado, mejorado respecto del servicio anterior, que protege a las mujeres y salva vidas cada día”. “Lamentablemente, ningún servicio dependiente de la tecnología es infalible”, ha recalcado, pero “lo importante es que, si se producen incidencias, se activa la respuesta inmediata para cada dificultad a través de protocolos de actuación”, ha asegurado la delegada del Gobierno contra la Violencia de Género.
Migración
Sobre el proceso de migración, Martínez Perza, ha aclarado que las dificultades detectadas afectaron a los procesos judiciales tramitados por delitos de quebrantamiento de pena o medida de alejamiento ya sucedidas, no a la seguridad de las mujeres. Igualmente, ha negado que exista un elevado número de sobreseimientos y absoluciones, matizando que, en la mayoría de los casos en los que no se pudieron aportar datos en el momento requerido se resolvieron posteriormente, pues los sobreseimientos provisionales se pueden reabrir una vez se cuenta con la información necesaria. Junto a ello, ha informado de que los datos de COMETA no son la única prueba a valorar por el juzgado.
En cualquier caso, la delegada ha indicado que, tras conocer las incidencias, tanto la Delegación del Gobierno contra la Violencia de Género como la División TIC del Ministerio de Igualdad trabajaron intensamente logrando, a finales de noviembre del año pasado, el pleno acceso a la información de las bases de datos de la anterior adjudicataria. “La falta de información momentánea en ningún caso ha afectado a delitos de violencia de género, como puede ser una agresión, sino a delitos de quebrantamiento de condena, es decir, el incumplimiento de una orden de alejamiento”, ha remarcado la delegada.
Carmen Martínez Perza ha insistido en que “el ministerio no ha mirado nunca para otro lado”. “Cuando se detectaron las incidencias, se convocaron reuniones con las empresas y las trabajadoras y se ha hecho una labor de seguimiento en todo momento”, ha dicho. En ese sentido, ha insistido en que se realiza un seguimiento constante en contacto con la UTE, existe coordinación individualizada de incidencias, se recogen quejas y sugerencias en las reuniones mensuales de seguimiento, junto a reuniones técnicas y también de alto nivel.
De esta forma, el Plan de Seguimiento contempla una coordinación diaria con la Sala COMETA, la recepción semanal y mensual de informes en la Delegación del Gobierno contra la Violencia de Género para el seguimiento de la calidad y eficacia del servicio, comisiones mensuales de seguimiento con la UTE, la última este pasado martes 23 de septiembre; así como formaciones con el personal de la sala, refuerzos en periodos de especial peligrosidad, como verano, Semana Santa o Navidad; el análisis de mejoras entre técnicos de la UTE y del Ministerio de Igualdad; o la implementación de herramientas de seguimiento y evaluación de riesgos psicosociales y apoyo telefónico al personal de sala de especialistas en psicología.
“Todo este trabajo de seguimiento del servicio se hace desde la discreción puesto que estamos hablando de víctimas y maltratadores, víctimas que necesitan tranquilidad y seguridad”, ha aseverado la delegada.
Mejoras próximo pliego
Carmen Martínez Perza ha adelantado que ya se trabaja en el borrador del próximo pliego en el que se incluirán mejoras como el desarrollo, actualización, gestión y explotación de la plataforma y aplicación de dispositivo; la exigencia de desarrollo de una aplicación de consulta en tiempo real para la Delegación; o el que los dispositivos, que seguirán siendo propiedad del ministerio, sean “compatibles con el sistema” y no puedan “ser manipulables”. Por otro lado, se requerirá una configuración individualizada de idioma en los dispositivos, así como la atención a las víctimas en los idiomas necesarios, la exigencia de desarrollo de un módulo de quejas, o el refuerzo de personal especializado para mejor servicio en las llamadas.
Para terminar, Martínez Perza ha subrayado que “por encima de todo está la seguridad de las mujeres”, para reiterar que “la protección de las mujeres no se ha interrumpido: ni en la transición de contratos, ni en la gestión de incidencias”.
La delegada del Gobierno contra la Violencia de Género ha anunciado luego que se pondrá en contacto personalmente con las víctimas para “pedirles disculpas por el ruido en torno a los dispositivos COMETA y para poner a su disposición a la Delegación de Gobierno contra la Violencia de Género a través de nuestro personal en las delegaciones y subdelegaciones del Gobierno”.
Martínez Perza ha terminado remarcando el compromiso “firme e inquebrantable” del Gobierno con la protección de las víctimas y con la mejora constante de los recursos destinados a garantizar su seguridad.